Las barritas de avena y miel son una opción ideal para quienes buscan una merienda rica, práctica y saludable.
Son fáciles de preparar en casa, se conservan bien y podés personalizarlas con frutos secos, semillas o frutas deshidratadas.
Te recomendamos: El secreto mejor guardado para un Lemon Pie perfecto en casa
Con pocos ingredientes lográs un snack nutritivo que aporta energía y fibra para cualquier momento del día.
Ingredientes
-
300 g de avena arrollada
-
150 g de miel
-
50 g de manteca o aceite de coco
-
50 g de azúcar mascabo (opcional, para más dulzor)
-
80 g de frutos secos picados (almendras, nueces o maní)
-
50 g de semillas (chía, sésamo o girasol)
-
50 g de frutas deshidratadas (pasas de uva, arándanos o dátiles)
-
1 cucharadita de esencia de vainilla
Preparación
-
En una sartén o cacerola, derretí la manteca junto con la miel y el azúcar mascabo a fuego bajo hasta integrar.
-
Incorporá la esencia de vainilla y mezclá bien.
-
En un bol grande, colocá la avena, los frutos secos, las semillas y las frutas deshidratadas.
-
Verté la mezcla líquida sobre los ingredientes secos y mezclá hasta que todo quede bien unido.
-
Colocá la preparación en una fuente rectangular forrada con papel manteca, presionando bien con una espátula o cuchara para compactar.
-
Dejá enfriar a temperatura ambiente y luego llevá a la heladera por 2 horas.
-
Una vez firme, cortá en barritas del tamaño que prefieras.
Consejos:
-
Podés tostar la avena y los frutos secos antes de mezclarlos para intensificar su sabor.
-
Si querés una versión más crocante, agregá un poco de arroz inflado o copos de maíz triturados.
-
Para variar la receta, probá distintas combinaciones de frutas deshidratadas como damascos, higos o peras secas.
-
Guardalas en frascos herméticos de vidrio para que se conserven frescas por más tiempo.
-
Podés envolver cada barrita en papel manteca y tenerlas listas para llevar en la mochila o la vianda.
-
Si preferís un snack más energético, incorporá chips de chocolate amargo o coco rallado.
-
Reemplazá la miel por jarabe de agave o de arce si buscás una versión vegana.
-
Para darles un toque más gourmet, cubrí la base de las barritas con chocolate derretido y dejalo endurecer antes de cortarlas.
-
Si te gustan las texturas más suaves, aumentá la cantidad de miel y reducí un poco la avena.
-
Congelalas envueltas individualmente: podés guardarlas hasta por un mes y sacarlas cuando las necesites.
-
Usá moldes de silicona individuales para darles forma sin necesidad de cortar después.
-
Agregar una pizca de canela o jengibre en polvo le da un sabor diferente y aromático.
Las barritas de avena y miel son un snack casero perfecto para tener siempre a mano, aportando energía y sabor sin recurrir a productos industrializados.