Si estás buscando un postre fácil, rápido y diferente, esta gelatina de queso crema y bombones es la respuesta perfecta.
Con una textura cremosa y el toque dulce de los bombones, esta receta es ideal para compartir en reuniones familiares, cumpleaños o simplemente para darte un gusto en casa.
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Además, combina la suavidad del queso crema con el sabor único de la leche condensada, creando un postre irresistible que seguro encantará a grandes y chicos.
Ingredientes
- Bombones mini (cantidad al gusto)
- 1 paquete de queso crema (8 oz / 225 g)
- 1 lata de leche condensada (395 g)
- 1 lata de leche evaporada (310 g)
- 28 g de grenetina (gelatina sin sabor, equivalente a 4 sobres de 7 g cada uno)
- ½ taza de agua fría
Preparación
- Hidratá la grenetina: En un recipiente, colocá la grenetina en media taza de agua fría y dejala reposar durante 10-15 minutos, hasta que se forme una textura esponjosa.
- Disolvé la grenetina: Calentá la grenetina hidratada en el microondas por 30-60 segundos, o hasta que se derrita completamente. También podés hacerlo a baño maría.
- Prepará la mezcla de queso crema: En una licuadora, combiná el queso crema, la leche condensada, la leche evaporada y la grenetina derretida. Licuá hasta que la mezcla quede completamente homogénea y sin grumos.
- Armá la gelatina: Verté la mezcla en un refractario o molde para gelatina previamente engrasado con un poco de aceite. Distribuí los bombones mini por encima de la mezcla, asegurándote de que queden bien repartidos.
- Refrigerá: Colocá el refractario en la heladera y dejalo enfriar por al menos 3 horas, o hasta que la gelatina esté completamente firme.
- Serví y disfrutá: Una vez lista, cortá en porciones y serví este postre cremoso y dulce.
Consejos:
- Si no tenés bombones mini, podés usar bombones grandes cortados en trozos pequeños o decorarlo con galletitas trituradas.
- Para darle un toque extra, podés añadir esencia de vainilla o ralladura de limón a la mezcla.
- Usá un molde con formas divertidas para hacer la presentación más atractiva, especialmente para los niños.
- Conservá la gelatina en la heladera por un máximo de 3 días para mantener su frescura.
Esta gelatina de queso crema y bombones no solo es fácil de hacer, sino que también es un postre perfecto para cualquier ocasión.
Con su combinación de cremosidad y dulzura, se convertirá en un favorito en tu mesa. ¡Anímate a prepararla y disfrutá de su delicioso sabor!