La crema de limón, a menudo llamada «lemon curd», es una delicia fresca y cítrica que combina perfectamente con un montón de postres.
Su suavidad y sabor distintivo la hacen perfecta para untar sobre panecillos, tostadas, rellenar tartas o simplemente disfrutar a cucharadas.
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¡Y lo mejor de todo es que es realmente sencilla de preparar!
Ingredientes
- 90 ml de jugo de limón
- 60 gr de manteca derretida
- 170 gr de azúcar
- 20 gr de ralladura de limón (solo la parte amarilla)
- 2 huevos
Preparación
- En un bol grande, bate los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla homogénea y más clara.
- Incorpora a esta mezcla el jugo y la ralladura de limón. Revuelve bien.
- Lleva esta mezcla a una cacerola y agrega la manteca derretida. Cocina a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente para evitar que se queme o se formen grumos.
- Continúa cocinando y mezclando hasta que la preparación espese, lo que puede llevar entre 10 a 15 minutos. La crema estará lista cuando pueda cubrir el dorso de una cuchara y al pasar el dedo mantenga la marca.
- Retira del fuego y, si lo prefieres para obtener una textura más fina, pásala por un colador para eliminar la ralladura o cualquier grumo.
- Deja enfriar a temperatura ambiente y luego transfiere a un frasco hermético. Conserva en la heladera hasta su uso.
Esta crema de limón es una auténtica delicia. Con un balance perfecto entre lo dulce y lo ácido, es ideal para darle un toque fresco a tus postres.
Consejos:
- Para obtener un sabor más intenso, asegúrate de usar limones bien frescos y en lo posible orgánicos.
- Esta crema se conserva perfectamente en la heladera por hasta una semana.
- Es excelente para rellenar tortas, tartas o como base para otras preparaciones. ¡Dale rienda suelta a tu imaginación!