Esta tarta combina una base firme, un centro suave y una capa crujiente de manzanas con crumble dorado.
No lleva harina de trigo ni azúcar refinado, pero conserva el sabor y la textura de una tarta tradicional.

Te recomendamos: Cómo hacer estas exquisitas Magdalenas esponjosas
Ideal para disfrutar sin culpa en el desayuno, la merienda o como postre.
Ingredientes
Para la base:
-
2 tazas de harina de almendras (o harina de avena)
-
2 cucharadas de aceite de coco (o manteca derretida)
-
2 cucharadas de miel o 1 cucharadita de stevia líquida
-
1 huevo
-
1 cucharadita de esencia de vainilla
-
Pizca de sal
Para el relleno cremoso:
-
250 g de queso crema o ricota batida
-
2 cucharadas de miel o stevia a gusto
-
1 huevo
-
1 cucharadita de ralladura de limón
-
½ cucharadita de esencia de vainilla
Para la capa de manzana:
-
3 manzanas medianas
-
Jugo de ½ limón
-
½ cucharadita de canela en polvo
-
1 cucharada de miel (opcional)
Para el crumble:
-
1 taza de harina de almendras o avena molida
-
2 cucharadas de aceite de coco sólido o manteca fría
-
1 cucharada de miel o ½ cucharadita de stevia
-
½ cucharadita de canela
Preparación
-
En un bol mezclá la harina de almendras con la sal, el aceite de coco, la miel, el huevo y la vainilla. Amasá hasta formar una masa suave y algo húmeda.
-
Cubrí un molde desmontable de unos 22 cm presionando con los dedos para formar la base. Horneá a 180 °C por 10 minutos y reservá.
-
Batí el queso crema con el huevo, la miel, la vainilla y la ralladura de limón hasta lograr una mezcla uniforme. Verté sobre la base prehorneada.
-
Pelá y cortá las manzanas en láminas finas. Mezclalas con el jugo de limón, la canela y la miel. Distribuilas sobre el relleno cremoso.
-
En un bol mezclá la harina de almendras, la canela y la miel. Agregá el aceite de coco y frotá con los dedos hasta obtener una textura de migas. Cubrí las manzanas con esta mezcla.
-
Horneá a 180 °C durante 35 a 40 minutos hasta que la superficie esté dorada y el relleno firme.
-
Dejá enfriar a temperatura ambiente y luego llevá a la heladera durante al menos una hora antes de servir.
Tips y consejos:
-
Usá manzanas verdes para un sabor más ácido o rojas si preferís más dulzura.
-
Tostá la harina de almendras unos minutos antes de usarla para lograr un crumble más dorado.
-
Podés agregar una pizca de jengibre o nuez moscada para un aroma más especiado.
-
Para una versión sin lácteos, reemplazá el queso crema por leche de coco espesa.
-
Si querés un crumble más crocante, añadí un puñado de nueces picadas.
-
No cortes la tarta en caliente, esperá a que enfríe para que el relleno se asiente.
-
Guardala tapada en la heladera y durará fresca hasta 4 días.
-
Si preferís una textura más húmeda, agregá una cucharada extra de miel en el relleno.
-
Servila fría o a temperatura ambiente para disfrutar mejor la combinación de texturas.
-
Espolvoreá con un poco de coco rallado tostado antes de servir para darle un toque final.
Su equilibrio entre dulzura natural, cremosidad y crocante la convierte en una tarta que sorprende a todos, incluso a quienes no saben que es saludable.
Ideal para compartir en cualquier ocasión.
Raza Italiana Cosas de la terra nostra