Estas deliciosas croquetas de garbanzos y berenjena se pueden preparar de varias formas: fritas en sartén con abundante aceite, en una freidora de aire o en el horno convencional. Tú decides tu preferencia, aunque personalmente me inclino por la opción clásica de freírlas en sartén.
Estas croquetas son ideales para agregar legumbres a tus comidas de manera diferente a las recetas habituales. Todos los ingredientes se encuentran fácilmente en cualquier supermercado: garbanzos en conserva, berenjenas frescas, harina de garbanzo, curry, comino, sal, aceite de oliva y pan rallado. No hay excusas para no hacerlas ahora mismo.
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Ingredientes
- 1 berenjena grande
- 400 g de garbanzos cocidos en conserva
- 1 cucharadita de curry molido
- 1 cucharadita de comino molido
- 2 cucharaditas de sal de ajo
- Sal al gusto
- 80 gr. de harina de garbanzo
- Agua
- Aceite de oliva para freír en abundancia
- Pan rallado en abundancia
Preparación
- Envuelve la berenjena en papel film y colócala en el microondas. Programa 12 minutos a máxima potencia. Verifica si está tierna y, si es así, retírala y deja que se enfríe. Si no está tierna, ásala por un par de minutos más.
- Mientras tanto, lava y escurre bien los garbanzos para eliminar el líquido de la conserva. Colócalos en el recipiente de un robot de cocina o una batidora de mano y tritúralos. Agrega dos cucharadas de harina de garbanzo, el curry, el comino, la sal de ajo y la sal. Tritura nuevamente.
- Una vez que la berenjena esté a temperatura ambiente y puedas manipularla sin quemarte, córtala por la mitad y retira la carne. Agrégala al recipiente del robot de cocina y tritura nuevamente hasta obtener una pasta homogénea en la que todos los ingredientes estén bien incorporados. Deja enfriar en el refrigerador.
- Para rebozar las croquetas, prepara una papilla ligera con el resto de la harina de garbanzo y agua. Coloca la harina en un plato hondo y añade agua poco a poco, removiendo para integrar, hasta obtener una consistencia similar a la de un huevo batido.
- Forma las croquetas de la manera habitual, tomando porciones de la masa con una cuchara y dándoles su forma característica con la ayuda de otra cuchara. Pásalas por la mezcla de harina de garbanzo y luego por el pan rallado. Ve colocándolas en una fuente a medida que las formas y rebozas.
- Por último, calienta abundante aceite en una sartén y fríe las croquetas hasta que estén doradas. Déjalas escurrir en una bandeja con papel absorbente o sobre una rejilla metálica. Una vez listas, sírvelas de inmediato.
Disfruta de estas deliciosas croquetas de garbanzos y berenjena como parte de tu comida.